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El crudo invierno: la situación humanitaria en el este de Ucrania
'Paz': Es la respuesta definitiva de una anciana en el este de Ucrania: „Quiero paz nuevamente", repite. Su esposo asiente con la cabeza. La mujer mayor piensa por un momento y luego agrega: "Y si tengo un deseo más, me gustaría volver a ver a mis nietos". Viven en un pueblo al otro lado de la línea de contacto. Antes del estallido del conflicto, era un viaje de diez minutos en autobús, ahora solo pueden llegar a ahí arriesgando sus vidas. Sin embargo, la pareja de ancianos se pone en camino una vez al mes durante horas hasta llegar al puesto de control, soportando un frío glacial, por un sendero a través de la tierra de nadie, que además está minada, todavía les esperan más controles en el territorio ocupado.
Por la tarde repiten el proceso para poder llegar a casa a tiempo. En casa, sí, pero seguros no; el pequeño pueblo ubicado directamente en la línea de contacto recibe disparos casi todas las noches. Su esposo no ha tenido trabajo por mucho tiempo. Solía trabajar en las minas de carbón en el otro lado, desde el comienzo del conflicto está desempleado, como todos sus antiguos compañeros. Sería demasiado peligroso cruzar la línea todos los días. Ahora viven del producto de su pequeño jardín. El esposo señala con orgullo a las gallinas que pastan en un pequeño cobertizo en el patio trasero: 'Recibimos cinco de la Cruz Roja el año pasado, y este año ya son las diez'. Luego, el hombre de 60 años se voltea. El rostro y las manos curtidas por el trabajo le hacen verse de casi de 80, y continúa cortando leña a medida que se acerca el frío invierno.
Miedo al inminente invierno
Al igual que esta familia, millones de personas en el este de Ucrania temen el inminente comienzo del invierno. Hay meses en los que hay temor por las bajas temperaturas que hacen que la vida en las casas -a menudo restauradas- sea una tortura. Falta carbón para calentar las viviendas. Además, el suministro de agua amenaza con colapsar, lo que tendría como consecuencia que miles de personas estuvieran a -20 ° C en sus hogares. No obstante, sí hay suficiente carbón, pero al otro lado de la zona de conflicto. Solo un pequeño aspecto en un conflicto aún latente, que afecta particularmente a la población civil.
En muchos sentidos, el conflicto en el este de Ucrania ha tenido un impacto dramático en la vida cotidiana de la población local. Según las estimaciones de las Naciones Unidas, cuatro millones de personas dependen de la ayuda humanitaria en Ucrania: alimentos, agua, artículos de uso diario, entre otros. Más de tres millones de personas han huido del este de Ucrania, algunas a países vecinos, otras a diversas regiones de Ucrania. Los que se quedan suelen ser personas mayores, jubilados, enfermos y personas con discapacidad. Sin embargo, muchas organizaciones de ayuda ya no pueden dirigirse a las personas en las áreas controladas por los separatistas: a menudo hay problemas para registrarse con las autoridades de facto; los separatistas niegan completamente el acceso de las organizaciones internacionales no gubernamentales a los necesitados.
¿Cómo ayuda Alemania?
Junto con socios alemanes e internacionales, el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores apoya la entrega de alimentos y la atención médica para la población afectada y también, igualmente importante, con la provisión de agua potable y saneamiento. Los programas psicosociales ayudan a las personas a procesar lo que experimentaron durante la guerra. Otro componente del compromiso integral de Alemania es la eliminación de minas y desechos residuales: tan solo en este año, las minas terrestres o las trampas explosivas mataron a más de 85 personas. Alemania ha apoyado al pueblo de Ucrania desde el estallido del conflicto y se ha convertido en el mayor donante de la crisis humanitaria en Ucrania. Más de 23 millones de euros se han destinado a proyectos de ayuda solo en 2017.
Al mismo tiempo, Alemania continúa abogando por la plena implementación de los acuerdos de Minsk. Entre otras cosas, las partes en el conflicto están obligadas a garantizar el acceso sin impedimentos a las organizaciones de ayuda para todos los necesitados en el este de Ucrania.
Contra el olvido de crisis humanitarias
La crisis humanitaria en el este de Ucrania está siendo olvidada cada vez másen este país. Pero especialmente las emergencias humanitarias que no están en el ojo público necesitan apoyo. Junto con un grupo de organizaciones de ayuda alemanas, el Ministerio Federal de Relaciones Exteriores está utilizando la iniciativa #nichtvergesser (#sinolvidar) para crear conciencia sobre las crisis humanitarias a menudo ignoradas. Esto también se aplica a Ucrania: una crisis humanitaria en medio de Europa.
Traducción (m) Texto original: Gobierno Federal
